viernes, 6 de febrero de 2009

ORIGEN DEL � AMAG�ESTU�
Es una fiesta pagana cuyo origen se pierde en la noche de los tiempos. Aunque las referencias mas cercanas son las del pueblo celta se sabe, que estas fiestas agrarias formaban parte de las celebraciones del hombre prehist�rico.
La casta�a y el d�a de los difuntos aparecen asociados desde tiempo inmemorial a la fiesta del amag�estu, que generalmente se celebra en la primera quincena de noviembre, ante la llegada, del invierno que supone la muerte de la luz, el fin de un ciclo que se repite cada a�o.
Seg�n creencias antiguas la casta�a era el s�mbolo del alma de los difuntos. Cada casta�a que se com�a liberaba un alma del purgatorio. En otros muchos lugares se festeja el d�a 1 de noviembre , coincidiendo con la celebraci�n celta conocida como Samhain, una ceremonia de origen celta, de culto al fuego y a su efecto purificador sobre los malos esp�ritus y algunos malvados habitantes del bosque.
Los celtas no ten�an templos en el sentido latino de la palabra templum; celebraban sus fiestas y sus ceremonias rituales en un claro del bosque. Resulta, pues, por una raz�n u otra, que �el bosque y el templo eran, para los celtas, nociones equivalentes o intercambiables� (C. G. Guyonvarc�h, La civilisation celtique). �Los gallegos no tienen templos sino naturaleza� (V. Risco).
El d�a 1 de noviembre, los celtas apaciguaban los poderes del otro mundo y propiciaban la abundancia de las cosechas con la celebraci�n de la fiesta samhain, la cual era, para unos, el comienzo del invierno y, para otros, el final de verano; en todo caso era el principio de una nueva gestaci�n y de un periodo de intensa comunicaci�n entre los habitantes de �ste y del otro mundo. Se reun�a una gran multitud porque era una fiesta obligatoria. Quien no asist�a corr�a el peligro de perder la raz�n. La fiesta era para los celtas, una concentraci�n de lo sagrado, en un tiempo y lugar determinados.
Por las mismas fechas, los romanos celebraban las saturnales.
La costumbre de comer casta�as asadas con motivo de la festividad de la fiesta de Animas, ha sido com�n en toda la zona norte de la Pen�nsula .
Los vascos le llaman "kasta�arre-eguna", los catalanes , "casnyadas", en Galicia "magostos", en Portugal "magustos" (en donde la palabra "magusto" sirve tanto para denominar a las casta�as que se ingieren en estas fechas, como a la propia hoguera en que se hacen), en Asturias le llaman "amaguestu" al rito de comer en cuadrilla, casta�as asadas con sidra dulce por estas fechas. Hay que tener en cuenta que en las zonas en donde no hab�a casta�as se com�an los frutos de la zona. En Andaluc�a a estos frutos les llamaban "Tosantos". En todos estos sitios los j�venes pasaban por los domicilios a recoger los donativos de casta�as: Amag�estu.
El �amaguestu� era el tiempo que se reservaba para honrar las cosechas, despu�s del equinoccio (una costumbre que en �stos �ltimos a�os se intenta recuperar). En el tambi�n aparec�a un componente purificador: el fuego.
Dentro de las creencias populares las casta�as se utilizaban como hechizos de amor, o se dejan algunas casta�as asadas "para los ausentes" (Galicia y Asturias).

Tamboril para asar casta�a

Or�genes y distribuci�n del casta�o (Castanea sativa )
Muchas veces se ha hablado del origen aut�ctono del casta�o en Espa�a ( en general en la zona oeste de su distribuci�n), suponiendo una posible procedencia de Asia Menor o Italia, desde donde romanos y griegos lo extendieron por su fruto (para comer directamente o para hacer harina). Sin entrar en la evidente influencia de la propagaci�n humana, no se pueden obviar los registros pol�nicos que las especies del genero Castanea han dejado a lo largo de los tiempos, y as� encontramos en Espa�a restos pol�nicos del Cuaternario correspondientes al Pleistoceno inferior en Gerona, del Pleistoceno medio en Burgos y Madrid, del superior en San Sebasti�n y ya mas recientes, del Holoceno, en Gerona, Galicia y Navarra. Anteriores al Pleistoceno existen registros f�siles del Mioceno en Mallorca (probablemente de Castanea bale�rica), la Cerda�a (Gerona) y el Bajo Llobregat (Barcelona).
DISTRIBUCION
Llega por el este hasta el C�ucaso, por el norte alcanza el centro de Europa y baja hasta Argelia y los montes mediterrraneos de Marruecos. En Espa�a se encuentra en las zonas h�medas del norte, de Galicia a Catalu�a, pasando por Le�n, Zamora, Asturias, Santander, Pa�s Vasco y Navarra. En Catalu�a aparece en Barcelona y Gerona. En el centro de la pen�nsula se da en Gredos, el Valle del Tietar y los montes de Pe�a de Francia. En la zona sur aparece en las serranias de Aracena y Ronda, en Sierra Nevada y en Sierra Morena.
En la mayoria de las zonas donde se cultiva se celebran fiestas y ritos similares al amaguestu coincidiendo tambien en las mismas fechas, ya que como deciamos es una reminiscencia de ritos paganos de origen prehistorico.
Es por lo tanto una festividad relacionada con el culto a la fecundidad; de ah� su relaci�n directa con el fuego, representando al sol, dios, fecundador de la tierra.
Fiesta pagana que la iglesia cristianiz�.
Or�genes y distribuci�n del casta�o
Muchas veces se ha hablado del origen aut�ctono del casta�o en Espa�a ( en general en la zona oeste de su distribuci�n), suponiendo una posible procedencia de Asia Menor o Italia, desde donde romanos y griegos lo extendieron por su fruto (para comer directamente o para hacer harina). Sin entrar en la evidente influencia de la propagaci�n humana, no se pueden obviar los registros pol�nicos que las especies del genero Castanea han dejado a lo largo de los tiempos, y as� encontramos en Espa�a restos pol�nicos del Cuaternario correspondientes al Pleistoceno inferior en Gerona, del Pleistoceno medio en Burgos y Madrid, del superior en San Sebasti�n y ya mas recientes, del Holoceno, en Gerona, Galicia y Navarra. Anteriores al Pleistoceno existen registros f�siles del Mioceno en Mallorca (probablemente de Castanea bale�rica), la Cerda�a (Gerona) y el Bajo Llobregat (Barcelona).
DISTRIBUCION
Llega por el este hasta el C�ucaso, por el norte alcanza el centro de Europa y baja hasta Argelia y los montes mediterr�neos de Marruecos. En Espa�a se encuentra en las zonas h�medas del norte, de Galicia a Catalu�a, pasando por Le�n, Zamora, Asturias, Santander, Pa�s Vasco y Navarra. En Catalu�a aparece en Barcelona y Gerona. En el centro de la pen�nsula se da en Gredos, el Valle del Tietar y los montes de Pe�a de Francia. En la zona sur aparece en las serranias de Aracena y Ronda, en Sierra Nevada y en Sierra Morena.
En la mayoria de las zonas donde se cultiva se celebran fiestas y ritos similares al magosto coincidiendo tambien en las mismas fechas, ya que como deciamos es una reminiscencia de ritos paganos de origen prehistorico.
Es una festividad relacionada con el culto a la fecundidad; de ah� su relaci�n directa con el fuego, representando al sol, dios, fecundador de la tierra.
El dia de Todos los Santos, coincide, por lo tanto con una fiesta pagana que fue cristianizada.
Maximino Fernandez Sendin
Centro de Estudios de A Paradanta
ORIGEN DEL � AMAG�ESTU�
Es una fiesta pagana cuyo origen se pierde en la noche de los tiempos. Aunque las referencias mas cercanas son las del pueblo celta se sabe, que estas fiestas agrarias formaban parte de las celebraciones del hombre prehist�rico.
La casta�a y el d�a de los difuntos aparecen asociados desde tiempo inmemorial a la fiesta del amag�estu, que generalmente se celebra en la primera quincena de noviembre, ante la llegada, del invierno que supone la muerte de la luz, el fin de un ciclo que se repite cada a�o.
Seg�n creencias antiguas la casta�a era el s�mbolo del alma de los difuntos. Cada casta�a que se com�a liberaba un alma del purgatorio. En otros muchos lugares se festeja el d�a 1 de noviembre , coincidiendo con la celebraci�n celta conocida como Samhain, una ceremonia de origen celta, de culto al fuego y a su efecto purificador sobre los malos esp�ritus y algunos malvados habitantes del bosque.
Los celtas no ten�an templos en el sentido latino de la palabra templum; celebraban sus fiestas y sus ceremonias rituales en un claro del bosque. Resulta, pues, por una raz�n u otra, que �el bosque y el templo eran, para los celtas, nociones equivalentes o intercambiables� (C. G. Guyonvarc�h, La civilisation celtique). �Los gallegos no tienen templos sino naturaleza� (V. Risco).
El d�a 1 de noviembre, los celtas apaciguaban los poderes del otro mundo y propiciaban la abundancia de las cosechas con la celebraci�n de la fiesta samhain, la cual era, para unos, el comienzo del invierno y, para otros, el final de verano; en todo caso era el principio de una nueva gestaci�n y de un periodo de intensa comunicaci�n entre los habitantes de �ste y del otro mundo. Se reun�a una gran multitud porque era una fiesta obligatoria. Quien no asist�a corr�a el peligro de perder la raz�n. La fiesta era para los celtas, una concentraci�n de lo sagrado, en un tiempo y lugar determinados.
Por las mismas fechas, los romanos celebraban las saturnales.
La costumbre de comer casta�as asadas con motivo de la festividad de la fiesta de Animas, ha sido com�n en toda la zona norte de la Pen�nsula .
Los vascos le llaman "kasta�arre-eguna", los catalanes , "casnyadas", en Galicia "magostos", en Portugal "magustos" (en donde la palabra "magusto" sirve tanto para denominar a las casta�as que se ingieren en estas fechas, como a la propia hoguera en que se hacen), en Asturias le llaman "amaguestu" al rito de comer en cuadrilla, casta�as asadas con sidra dulce por estas fechas. Hay que tener en cuenta que en las zonas en donde no hab�a casta�as se com�an los frutos de la zona. En Andaluc�a a estos frutos les llamaban "Tosantos". En todos estos sitios los j�venes pasaban por los domicilios a recoger los donativos de casta�as: Amag�estu.
El �amaguestu� era el tiempo que se reservaba para honrar las cosechas, despu�s del equinoccio (una costumbre que en �stos �ltimos a�os se intenta recuperar). En el tambi�n aparec�a un componente purificador: el fuego.
Dentro de las creencias populares las casta�as se utilizaban como hechizos de amor, o se dejan algunas casta�as asadas "para los ausentes" (Galicia y Asturias).

Tamboril para asar casta�a

Or�genes y distribuci�n del casta�o (Castanea sativa )
Muchas veces se ha hablado del origen aut�ctono del casta�o en Espa�a ( en general en la zona oeste de su distribuci�n), suponiendo una posible procedencia de Asia Menor o Italia, desde donde romanos y griegos lo extendieron por su fruto (para comer directamente o para hacer harina). Sin entrar en la evidente influencia de la propagaci�n humana, no se pueden obviar los registros pol�nicos que las especies del genero Castanea han dejado a lo largo de los tiempos, y as� encontramos en Espa�a restos pol�nicos del Cuaternario correspondientes al Pleistoceno inferior en Gerona, del Pleistoceno medio en Burgos y Madrid, del superior en San Sebasti�n y ya mas recientes, del Holoceno, en Gerona, Galicia y Navarra. Anteriores al Pleistoceno existen registros f�siles del Mioceno en Mallorca (probablemente de Castanea bale�rica), la Cerda�a (Gerona) y el Bajo Llobregat (Barcelona).
DISTRIBUCION
Llega por el este hasta el C�ucaso, por el norte alcanza el centro de Europa y baja hasta Argelia y los montes mediterrraneos de Marruecos. En Espa�a se encuentra en las zonas h�medas del norte, de Galicia a Catalu�a, pasando por Le�n, Zamora, Asturias, Santander, Pa�s Vasco y Navarra. En Catalu�a aparece en Barcelona y Gerona. En el centro de la pen�nsula se da en Gredos, el Valle del Tietar y los montes de Pe�a de Francia. En la zona sur aparece en las serranias de Aracena y Ronda, en Sierra Nevada y en Sierra Morena.
En la mayoria de las zonas donde se cultiva se celebran fiestas y ritos similares al amaguestu coincidiendo tambien en las mismas fechas, ya que como deciamos es una reminiscencia de ritos paganos de origen prehistorico.
Es por lo tanto una festividad relacionada con el culto a la fecundidad; de ah� su relaci�n directa con el fuego, representando al sol, dios, fecundador de la tierra.
Fiesta pagana que la iglesia cristianiz�.
Or�genes y distribuci�n del casta�o
Muchas veces se ha hablado del origen aut�ctono del casta�o en Espa�a ( en general en la zona oeste de su distribuci�n), suponiendo una posible procedencia de Asia Menor o Italia, desde donde romanos y griegos lo extendieron por su fruto (para comer directamente o para hacer harina). Sin entrar en la evidente influencia de la propagaci�n humana, no se pueden obviar los registros pol�nicos que las especies del genero Castanea han dejado a lo largo de los tiempos, y as� encontramos en Espa�a restos pol�nicos del Cuaternario correspondientes al Pleistoceno inferior en Gerona, del Pleistoceno medio en Burgos y Madrid, del superior en San Sebasti�n y ya mas recientes, del Holoceno, en Gerona, Galicia y Navarra. Anteriores al Pleistoceno existen registros f�siles del Mioceno en Mallorca (probablemente de Castanea bale�rica), la Cerda�a (Gerona) y el Bajo Llobregat (Barcelona).
DISTRIBUCION
Llega por el este hasta el C�ucaso, por el norte alcanza el centro de Europa y baja hasta Argelia y los montes mediterr�neos de Marruecos. En Espa�a se encuentra en las zonas h�medas del norte, de Galicia a Catalu�a, pasando por Le�n, Zamora, Asturias, Santander, Pa�s Vasco y Navarra. En Catalu�a aparece en Barcelona y Gerona. En el centro de la pen�nsula se da en Gredos, el Valle del Tietar y los montes de Pe�a de Francia. En la zona sur aparece en las serranias de Aracena y Ronda, en Sierra Nevada y en Sierra Morena.
En la mayoria de las zonas donde se cultiva se celebran fiestas y ritos similares al magosto coincidiendo tambien en las mismas fechas, ya que como deciamos es una reminiscencia de ritos paganos de origen prehistorico.
Es una festividad relacionada con el culto a la fecundidad; de ah� su relaci�n directa con el fuego, representando al sol, dios, fecundador de la tierra.
El dia de Todos los Santos, coincide, por lo tanto con una fiesta pagana que fue cristianizada.
Maximino Fernandez Sendin
Centro de Estudios de A Paradanta
ORIGEN DEL � AMAG�ESTU�
Es una fiesta pagana cuyo origen se pierde en la noche de los tiempos. Aunque las referencias mas cercanas son las del pueblo celta se sabe, que estas fiestas agrarias formaban parte de las celebraciones del hombre prehist�rico.
La casta�a y el d�a de los difuntos aparecen asociados desde tiempo inmemorial a la fiesta del amag�estu, que generalmente se celebra en la primera quincena de noviembre, ante la llegada, del invierno que supone la muerte de la luz, el fin de un ciclo que se repite cada a�o.
Seg�n creencias antiguas la casta�a era el s�mbolo del alma de los difuntos. Cada casta�a que se com�a liberaba un alma del purgatorio. En otros muchos lugares se festeja el d�a 1 de noviembre , coincidiendo con la celebraci�n celta conocida como Samhain, una ceremonia de origen celta, de culto al fuego y a su efecto purificador sobre los malos esp�ritus y algunos malvados habitantes del bosque.
Los celtas no ten�an templos en el sentido latino de la palabra templum; celebraban sus fiestas y sus ceremonias rituales en un claro del bosque. Resulta, pues, por una raz�n u otra, que �el bosque y el templo eran, para los celtas, nociones equivalentes o intercambiables� (C. G. Guyonvarc�h, La civilisation celtique). �Los gallegos no tienen templos sino naturaleza� (V. Risco).
El d�a 1 de noviembre, los celtas apaciguaban los poderes del otro mundo y propiciaban la abundancia de las cosechas con la celebraci�n de la fiesta samhain, la cual era, para unos, el comienzo del invierno y, para otros, el final de verano; en todo caso era el principio de una nueva gestaci�n y de un periodo de intensa comunicaci�n entre los habitantes de �ste y del otro mundo. Se reun�a una gran multitud porque era una fiesta obligatoria. Quien no asist�a corr�a el peligro de perder la raz�n. La fiesta era para los celtas, una concentraci�n de lo sagrado, en un tiempo y lugar determinados.
Por las mismas fechas, los romanos celebraban las saturnales.
La costumbre de comer casta�as asadas con motivo de la festividad de la fiesta de Animas, ha sido com�n en toda la zona norte de la Pen�nsula .
Los vascos le llaman "kasta�arre-eguna", los catalanes , "casnyadas", en Galicia "magostos", en Portugal "magustos" (en donde la palabra "magusto" sirve tanto para denominar a las casta�as que se ingieren en estas fechas, como a la propia hoguera en que se hacen), en Asturias le llaman "amaguestu" al rito de comer en cuadrilla, casta�as asadas con sidra dulce por estas fechas. Hay que tener en cuenta que en las zonas en donde no hab�a casta�as se com�an los frutos de la zona. En Andaluc�a a estos frutos les llamaban "Tosantos". En todos estos sitios los j�venes pasaban por los domicilios a recoger los donativos de casta�as: Amag�estu.
El �amaguestu� era el tiempo que se reservaba para honrar las cosechas, despu�s del equinoccio (una costumbre que en �stos �ltimos a�os se intenta recuperar). En el tambi�n aparec�a un componente purificador: el fuego.
Dentro de las creencias populares las casta�as se utilizaban como hechizos de amor, o se dejan algunas casta�as asadas "para los ausentes" (Galicia y Asturias).

Tamboril para asar casta�a

Or�genes y distribuci�n del casta�o (Castanea sativa )
Muchas veces se ha hablado del origen aut�ctono del casta�o en Espa�a ( en general en la zona oeste de su distribuci�n), suponiendo una posible procedencia de Asia Menor o Italia, desde donde romanos y griegos lo extendieron por su fruto (para comer directamente o para hacer harina). Sin entrar en la evidente influencia de la propagaci�n humana, no se pueden obviar los registros pol�nicos que las especies del genero Castanea han dejado a lo largo de los tiempos, y as� encontramos en Espa�a restos pol�nicos del Cuaternario correspondientes al Pleistoceno inferior en Gerona, del Pleistoceno medio en Burgos y Madrid, del superior en San Sebasti�n y ya mas recientes, del Holoceno, en Gerona, Galicia y Navarra. Anteriores al Pleistoceno existen registros f�siles del Mioceno en Mallorca (probablemente de Castanea bale�rica), la Cerda�a (Gerona) y el Bajo Llobregat (Barcelona).
DISTRIBUCION
Llega por el este hasta el C�ucaso, por el norte alcanza el centro de Europa y baja hasta Argelia y los montes mediterrraneos de Marruecos. En Espa�a se encuentra en las zonas h�medas del norte, de Galicia a Catalu�a, pasando por Le�n, Zamora, Asturias, Santander, Pa�s Vasco y Navarra. En Catalu�a aparece en Barcelona y Gerona. En el centro de la pen�nsula se da en Gredos, el Valle del Tietar y los montes de Pe�a de Francia. En la zona sur aparece en las serranias de Aracena y Ronda, en Sierra Nevada y en Sierra Morena.
En la mayoria de las zonas donde se cultiva se celebran fiestas y ritos similares al amaguestu coincidiendo tambien en las mismas fechas, ya que como deciamos es una reminiscencia de ritos paganos de origen prehistorico.
Es por lo tanto una festividad relacionada con el culto a la fecundidad; de ah� su relaci�n directa con el fuego, representando al sol, dios, fecundador de la tierra.
Fiesta pagana que la iglesia cristianiz�.
Or�genes y distribuci�n del casta�o
Muchas veces se ha hablado del origen aut�ctono del casta�o en Espa�a ( en general en la zona oeste de su distribuci�n), suponiendo una posible procedencia de Asia Menor o Italia, desde donde romanos y griegos lo extendieron por su fruto (para comer directamente o para hacer harina). Sin entrar en la evidente influencia de la propagaci�n humana, no se pueden obviar los registros pol�nicos que las especies del genero Castanea han dejado a lo largo de los tiempos, y as� encontramos en Espa�a restos pol�nicos del Cuaternario correspondientes al Pleistoceno inferior en Gerona, del Pleistoceno medio en Burgos y Madrid, del superior en San Sebasti�n y ya mas recientes, del Holoceno, en Gerona, Galicia y Navarra. Anteriores al Pleistoceno existen registros f�siles del Mioceno en Mallorca (probablemente de Castanea bale�rica), la Cerda�a (Gerona) y el Bajo Llobregat (Barcelona).
DISTRIBUCION
Llega por el este hasta el C�ucaso, por el norte alcanza el centro de Europa y baja hasta Argelia y los montes mediterr�neos de Marruecos. En Espa�a se encuentra en las zonas h�medas del norte, de Galicia a Catalu�a, pasando por Le�n, Zamora, Asturias, Santander, Pa�s Vasco y Navarra. En Catalu�a aparece en Barcelona y Gerona. En el centro de la pen�nsula se da en Gredos, el Valle del Tietar y los montes de Pe�a de Francia. En la zona sur aparece en las serranias de Aracena y Ronda, en Sierra Nevada y en Sierra Morena.
En la mayoria de las zonas donde se cultiva se celebran fiestas y ritos similares al magosto coincidiendo tambien en las mismas fechas, ya que como deciamos es una reminiscencia de ritos paganos de origen prehistorico.
Es una festividad relacionada con el culto a la fecundidad; de ah� su relaci�n directa con el fuego, representando al sol, dios, fecundador de la tierra.
El dia de Todos los Santos, coincide, por lo tanto con una fiesta pagana que fue cristianizada.
Maximino Fernandez Sendin
Centro de Estudios de A Paradanta
Nuevo colaborador de Colunga DigitalSendín inicia sus colaboraciones con nosotros con una sección que titularemos "Las Luces de" y que hoy arranca hablándonos de sus últimas investigaciones etnográficas, centradas en un personaje gallego que llegó a reinar entre las tribus jíbaras de la Amazonía.
Colunga Digital está orgullosa de presentar a un nuevo colaborador, a otro crack que dirían nuestros visitantes más jóvenes.
Se trata de Mmaximino Fernández Sendín. Etnografo, investigador, escritor, inventor entre otros de la Lámpara de multifilamento de cambio automático que es una auténtica revolución en el mundo de la iluminación.
En el Salón de Inventos de Bilbao 2005, Maximino Fernández Sendín consiguió La Medalla de Oro en el I Salón de Inventos de Bilbao. Celebrado en el “Bilbao Exhibition Center” del 12 al 15 de Mayo de 2005.
A este acto se presentaron 250 creaciones y concurrieron 145 inventores. El Jurado del I Salón de Inventos de Bilbao estaba compuesto por representantes de entidades como Telefónica, Departamento de Industria de Comercio, Gobierno Vasco, Cámara de Comercio, Escuela Técnica Superior de Ingenieros, Universidad del País Vasco. Resultando la Lámpara Multifilamento de Cambio Automático premiada con una Medalla de Oro concedidas en dicho evento.
La repercusión de este premio, ha sido muy importante, siendo reflejado por diferentes medios de comunicación, tanto de prensa escrita, como de radio y televisión.
Pero a Fernández Sedín le fascinan ciencias como Filosofía, Antropología, Psicología social, etnografía ... y todas las ciencias que profundizan en las pautas del comportamiento humano.
¡Que lo disfrutéis!
GRAÑA CORTIZO, Ildefonso. : Mas conocido como: Alfonso Graña. Alfonso I de la Amazonia. Rey de los Jíbaros. Amiudal- Avión (Ourense) 5. III. 1878- Selva Amazónica (Perú) 1934. Rey ( apu) de las tribus jíbaras , aguaruna y huambisa en los ríos Nieva y Santiago del Alto Marañón.
La pobreza y las enfermedades castigaban, secularmente, estas comarcas de la montaña gallega, lo que motivó a finales del siglo XIX, una emigración masiva a América. Graña , como otros muchos de la zona, embarcó con destino (Brasil) y un tiempo después se traslada a Iquitos (Perú).
Trabaja como cauchero y también buscando oro << Y tras la crisis del caucho, en 1922, se internó en lo mas profundo de la selva acompañado de un vecino y amigo, de Galicia y se encontraron con una tribu de indios jíbaros, al amigo lo matan, pero a Alfonso Graña le respetan la vida porque se encapricha con él la hija del apu (jefe)

Alfonso I de la Amazonía
Hasta aquí el relato de D. Emilio Rosendo de 96 años vecino de Avión. Durante varios años se pierde su rastro, hasta que un día aparece en Iquitos con remeros indios y dos balsas cargadas con productos de la selva <<>> Allí visita a otro gallego, Cesáreo Mosquera, propietario de la célebre librería “ Amigos del País” lugar de encuentro de muchos emigrantes .
Mosquera por aquellas fechas tuvo conocimiento de que el capitán Iglesias Brage, piloto de renombre, preparaba una expedición al Amazonas y le escribió para ofrecerle su apoyo y el de Graña, Iglesias Brage muy complacido, aceptó y dio comienzo una extensa correspondencia que comenzó en 1931 y finaliza en 1935. Durante estos años, cada vez que baja de la selva relata a Mosquera cuanto pudiera ser de interés para la Expedición y éste se lo envía al capitán Iglesias Brage que a su vez se lo facilita a Víctor de la Serna, el cual dedica varios artículos : <<>>
Su sagacidad e inteligencia le permitieron realizar la encomiable tarea <> a estos belicosos indios , enseñándoles a curtir pieles, a fabricar chozas, a extraer sal de un rió salino que pasaba por su territorio, a desecar la carne del paiche , gigantesco pez del Amazonas…pacificando a las diferentes tribus que habitaban este inmenso territorio.
Cuando, la Stándar Oil y la Sstándar California, quisieron explorar el territorio en busca de petróleo, tuvieron que pactar con Graña, que los guió a través de la selva <<…y los americanos pudieron vivir y comer…>>
En 1932 la Latín American Expedition dirigida por Mr. Williers se perdió en la selva , Graña salió en su auxilio aprovisionándolos de víveres . En 1933 un avión de las Fuerzas Aéreas Peruanas se estrelló en la selva , falleciendo el piloto. Con la ayuda de sus fieles indios embalsama el cadáver , construye un ataúd con madera y chapas y en dos balsas de más de 10 metros que el mismo había construido, traslada el féretro y dos hidroaviones desarmados hasta Iquitos, atravesando el temible Pongo de Manseriche, en una epopeya sin precedentes.<<>> fue gratificado por las F:A:P. En la actualidad el Aeropuerto de Arequipa ( Perú), lleva el nombre del piloto rescatado por Graña “ Aeropuerto Internacional Alfredo Rodríguez Ballon””
Alfonso Graña falleció en la selva en 1934 a los 56 años de un cáncer de estómago, con la respetuosa veneración de los indios jíbaros.
BIBLIOGRAFÍAM. FERNANDEZ SENDIN. Alfonso I de la Amazonia. Rey de los Jibaros. La increíble y veraz historia de Alfonso Graña, el gallego que reinó entre las tribus jíbaras del Alto Marañón Pontevedra. Fundación Comarcal A Paradanta. 2005.